Esta entrada es para msotrar los efectos de peluquería y defoliado en dos sujetos de mi jardín. Un campestre y un manzano.
En el caso del campestre, el tamaño de las hojas era desproporcionado, y como mostré en otro post, me decidí a defoliarlo entero.Fotos de antes y después del defoliado
Esto lo hice a finales de mayo, y ahora está así
Aunque sigue habiendo alguna hoja grande, el tamaño se ha reducido con respecto a la primera brotación del año. Pero sobre todo me gusta haber conseguido brotación trasera
Antes solo concentraba brotación en las puntas de las ramas.
En el caso del manzano no hubo defoliado, solo peluquería pero fuerte. Incluso practiqué poda algo brusca para esa época. Pero bueno, este manzano tiene mucha fuerza, y se le pueden acelerar algunos procesos, o al menos eso espero
Se ve que se ha creado mucha brotación nueva , y bueno, la reducción de hoja me va a costar lo suyo, pero ahí voy cortando alguna hoja de mayor tamaño y pinzando los nuevo brotes.También ha brotado bastante del interior.
De hecho en ambos he tenido que quitar nuevos brotes y chupones pegados a los inicios de las ramas ya existentes, en lugares no deseados, etc.
En cuanto al verano, que al menos en madrid ya ha llegado con fuerza, yo de momento no me doy por enterado y sigo abonando. Ha habido tan poca primavera, que hay que alargarla lo máximo posible, si quiero avanzar con estos proyectos...
Hola Daniel. En el campestre has conseguido tu objetivo, has reducido considerablemente el tamaño de las hojas y has conseguido brotación trasera y en cuanto a manzano, va muy bien, tiene un tronco fantástico y una ramificación muy buena. Me gusta mucho.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias por tus ánimos Ishi.
ResponderEliminarEl manazno sale bien porque siempre que le voy a hacer una foto me pide que le saque el perfil bueno, pero por otros lados se le ven más defectillos. Y la ramificación todavía es basta, pero es agradecido y con veinte o treinta de estas que le haga conseguiré refinarlo.
Gracias por leer y participar.
Un abrazo
Buen crecimiento en este tiempo. En el arce (bonito tronco, por cierto) has conseguido reducir un poco la hoja. Casi podrías volver a cortar las hojas de mayor tamaño del exterior para favorecer a los nuevos brotes interiores. En un par de años vas a conseguir una ramificación muy buena.
ResponderEliminarSerá el perfil bueno el del manzano, pero tiene muy buena pinta, y se ve fuerte y sano, seguro que seguirá respondiendo así de bien.
Se nota que los mimas...
Un abrazo. César.
Gracias César.Con intervenciones asi da gusto mantener el blog. Me animas mucho, la verdad.
EliminarY tienes razón con las hojas de más tamaño. Ya quité alguna después de la foto, y seguiré haciéndolo.
Este manzano lo compré a un compañero en portalbonsai a raiz desnuda, y entre el nebari y las pedazo ramas que tenía, no había quien le metiera mano, pero poco a poco lo voy domando, sobre todo de raíces, y espero en un par de años transplantarlo a maceta de bonsai, pero ya se sabe , piano piano.
Un abrazo César
Hola Daniel,
ResponderEliminartanto el arce como el manzano, me parecen árboles interesantes, sobre todo por sus potentes nebaris.
En cuanto al arce, me da la impresión por las fotos que en los últimos años ha sufrido podas fuertes y por tanto, es lógico que ahora responda haciendo hojas grandes. Poco a poco ya conseguirás ir reduciéndolas.
De todas formas, en especies frondosas como las hayas o los arces campestres, es preferible dejár alguna rama de más, ya que si nos empeñamos en elimiar todas las ramas que no encajan en los cánones clásicos, luego será muy difícil disimular las cicatrices de poda.
Si tienes oportunidad, fíjate en las hayas japonesas que se ven en las fotos de la kokufu: Prácticamente todas tienen ramas que salen a la misma altura, en ruedas de carro, y algún defecto de conicidad invertida.
Un abrazo.
Hola Carlos, gracias por tus comentarios.
EliminarSiempre había oído que los campestres reducen mal la hoja, o que al menos es difícil, pero he visto algún ejemplar con la hoja bastante mas pequeña y eso me anima.
Lo que desconocía era que no cicatrizaran bien las heridas, pero es totalmente cierto, porque alguna la tiene de hace muuucho y ahí sigue.
Seré menos severo con la poda al campestre.
Un abrazo